
JUGABAN NEGRAS
Jugaban negras.
De repente me viene a la cabeza:
«y si rindo el rey
para salvar peón»
Naturalmente, sonreí. Pero lo hice.
Perdí, claro;
pero aquella sonrisa
compensaba con creces la derrota.
J.L. Rico (de PENSAMIENTOS CLAROSCUROS)